SALTO DE MARTÍS
Un paseo por el Salto de Martís, sabíamos que en agosto no llevaba agua aún así fuimos a verlo jejeje
Foto del Salto sin agua, tiene su encanto también, se puede ver las formaciones rocosas y algún que otro fósil.Foto con agua, impresionante la caída que tiene. Foto cogida de turismo de Pla de l'Estany.
Salto de Martís, prácticamente seco. En esta zona, encontraréis el primer salto de agua conocido con el nombre de Cascada Pequeña de Martís o de Espolla, y un poco más adelante, encontraréis uno mucho más espectacular conocido como el Gros d’Espolla o Martís. Aquí hay un mirador para que disfrutéis de este espectáculo de la naturaleza del Pla de l'Estany. El descenso del agua forma algunos pozos, como por ejemplo el pozo dels Gossos o el pozo de las Anguiles.
Sin llegar a Martís de Dalt, encarados hacia el sur y junto al Rec d’Espolla, continuáis el camino para llegar al Estanque de Espolla, el agua del cual se desagua hacia el río Fluvià mediante el Rec d’Espolla que genera las cascadas de agua que habéis contemplado a lo largo de este camino. Por lo tanto, es interesante hacer esta ruta después de unos meses bastante lluviosos porque las cascadas son muy bonitas cuando están cargadas de agua. Aún así, la ruta es muy bonita durante todo el año porque, alrededor de las cascadas, la vegetación es fresca y sombría, encontraréis el suelo cubierto de musgo y helechos, y podréis pasear por un bosque de encinas con numerosos pies de laureles y algún acebo
El Estanque de Espolla es famoso por la existencia de los triops (conocidos por la gente de la zona como tortuguetes, "tortuguitas")
Cabe destacar que el estanque temporal de Espolla está incluido en el PEIN (Pla de Espacios de Interés Natural) de la Generalitat de Cataluña
Castillo de Esponellà está situado en la cima de la montaña.
La ruta es corta pero muy bonita porque os adentraréis en un bosque y estaréis en contacto con la naturaleza característica de los alrededores del río Fluvià.
Actualmente, el castillo se encuentra en ruinas pero se hacen excavaciones; aún así, podréis diferenciar diferentes espacios que conformaban su estructura original, como por ejemplo los tres recintos amurallados. En la parte más alta hay una torre que ha sido excavada y restaurada, en la parte baja, otra torre circular que conserva una aspillera de tiro.
Este castillo, que fue erigido en castillo fronterizo en 1381, debía tener su origen en una torre o fuerza de vigilancia, de la que fueron castellanos, ya durante el siglo XI, los Creixell de Borrassá, la familia alcanzó posteriormente una notable influencia en los estratos de la pequeña nobleza rural gerundense.
Que la torre no pasó de ser puesto de vigilancia y control, no alcanzando la categoría de verdadero castillo fronterizo, nos lo revela el sucesivo cambio de poseedores. A Creixell los sucedieron los Palera, durante los siglos XII y XIII. En este siglo, el rey Jaime I de Aragón permitió a Guillermo de Palera la reedificación de la fuerza. Después el castillo pasó a manos de la familia de Vilademuls bajo el señorío de Dalmau de Rocabertí, el cual traspasó los derechos del castillo a los Sort.
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